En Ser y tiempo Heidegger señala el λόγος como aquella palabra griega que «significa fundamentalmente “decir”»1 en el ámbito de las filosofías desplegadas por Platón y Aristóteles. Un “decir” que puede abrirse camino desde la razón, el juicio, el concepto, la definición, etcétera. En este sentido, esto es, con el λόγος en cuanto “decir”, tal palabra parece estar irremediablemente unida con el δηλοῦν, pues el “decir” lo que hace es “mostrar” algo a alguien. Así, también, el “decir” que “muestra” lo hace gracias a la φωνή, pues sin la voz el “decir” no dice nada. En definitiva, el λόγος, desde estas coordenadas platónicas y aristotélicas, es un hacer ver que puede resultar verdadero o falso.
Pero el filósofo alemán avisa que debe quitarse uno de encima, por decir así, la verdad como concordancia si se quiere atisbar el sentido originario de la verdad griega. Y con lo anterior, el λόγος tiende a efectuar tal concordancia, o sea, la verdad se presenta como algo metafísico cuyo gélido corazón no es otro que el de la lógica, una lógica de la que parten el enunciado, la proposición, la definición, etcétera. Por ello dice Heidegger que no es tal λόγος «el lugar primario de la verdad»2. Entonces, ¿cuál es ese “lugar” primario según el filósofo alemán? La percepción sensible es el origen primario de la verdad en Grecia, por lo que «’Verdadero’ en el sentido más puro y originario […] es el puro νοεῖν, la mera percepción contemplativa de las más simples determinaciones del ser del ente en cuanto tal»3. Y el νοεῖν nunca puede ser falso sino verdadero o ἀγνοειν (no-percepción).
En esos estadios originarios de la verdad griega, pues, el λόγος no está todavía caracterizado por el “decir” lógico que se ha descrito antes. Y en tales estadios originarios, hubo «un pensador que pensó el λόγος antes de Platón y Aristóteles y que lo pensó, quizás, de manera tan esencial que la palabra λόγος constituyó la palabra fundamental de su pensar: Ese pensador es Heráclito»4. Con la palabra λόγος el de Éfeso «designó el propio ser, lo uno unificador de todo ente». De esta manera se puede apreciar que lo concebido por Heráclito sobre el λόγος es muy «diferente del pensado por la ‘lógica’ como ‘enunciado’, ‘decir’, ‘discurso’, ‘palabra’, ‘juicio’ y ‘razón’», es decir, lo pensado por Platón, Aristóteles y todos los que vendrán después.
1Heidegger, 2012.
2Ibíd.
3Ibíd.
4Heidegger, 2012 (I).

